El pasado 12 de julio tuvo lugar un interesante coloquio sobre ´Moda, Vanguardia y Comunicación’ organizado por COSO Moda, con el que finalizó sus actividades del curso en el Colegio Mayor Saomar . En esta ocasión el invitado fue el pintor, escultor y restaurador Pedro Arrúe, vestidor de la Virgen, que habló sobre la estética de Nuestra Señora
Arrúe es un artista vocacional, estudió en la Escuela de Artesanos de Valencia. Vinculado al arte sacro de la ciudad. Entre sus trabajos como restaurador destaca la imagen de la Virgen de los Desamparados, icono del que es un gran conocedor y muchas obras del Colegio del Patriarca de Valencia, es el autor del retrato de Juan Pablo II que se encuentra en la Basílica. Posee una colección de distintas épocas que se expone en este momento en el Palacio de Colomina de Valencia. Durante su intervención profundizó en los Mantos históricos de la Virgen, habló del tipo de bordado con el que se confecciona así como de los diferentes tejidos y joyas utilizados en la elaboración, que los convierte en auténticas obras de arte, siempre ha ido cuajada de joyas y de relicarios maravillosos. El pintor destacó el origen de las joyas más significativas que ha lucido la Virgen, joyas históricas como los pendientes de girandoles regalados por la Duquesa de Valeriola y Almodóvar, los pectorales de lazo de Isabel de Farnesio que lució en el momento de la Coronación, las esmeraldas de Isabel II y las pulseras de la Reina María Cristina.
Pedro Arrúe resaltó la importancia del Padre Jofre en la fundación de la Cofradía de la Virgen de los Desamparados, dado su interés por amparar a los enfermos mentales y personas desvalidas. Ilustró con imágenes cómo se situaba a la Virgen en el momento del entierro, cobijando el cuerpo del que habían abandonado. Sobre la corona, que es de tambor al estilo de Borgoña, hizo un recorrido de los distintos modelos que había lucido y los materiales utilizados, como el cartón con perlas engarzadas y cosidas al alambre; de las joyas destacó el broche de diamantes donado por el Conde de Oropesa en agradecimiento por su curación de la peste.
El restaurador habló del término «intervención» en lugar de «restauración» y de las distintas intervenciones que había habido en la imagen como la de Octavio Vicens, Carmelo Vicens, López y él mismo. Relató que las facciones, la mirada, la tonalidad de la piel, giran con el tiempo «que es el que mejor pinta, da carácter, belleza y sabor». Aclaró que las pelucas nunca son de pelo natural sino de seda. Afirmó que como icono despierta todo tipo de emociones entre la gente, es un vínculo. Una interesantísima intervención con la que disfrutaron los asistentes.