El pasado 6 de noviembre, tuvo lugar en la EASD, la conferencia de Lourdes Delgado Luque «Vestir un mundo sostenible» que fue organizada por la Fundación COSO. Asistieron profesores y alumnos del máster de sostenibilidad y público de COSO Moda.
El acto fue presentado por Rosa Esteban, directora de la Escuela de Arte y Superior de Diseño de Valencia, que tuvo palabras de agradecimiento para la Fundación COSO por las iniciativas de colaboración con dicha institución, y en apoyo al diseño y la creatividad como lenguaje comunicativo con gran trascendencia social y cultural.
Los asistentes a la conferencia siguieron con interés a Lourdes Delgado que partió de la idea de que la sostenibilidad no es un fin absoluto. Afirmó que debemos producir teniendo en primera línea de nuestros objetivos, nuestros principios e ideas esenciales. Insistió en que el modelo de producción solo puede cambiar si cambiamos el modelo de consumo.
Delgado habló de evitar el sectarismo y defendió la importancia de comunicar bien la sostenibilidad, así como de la formación, que debe ser continua. También resaltó el enfoque del sector moda para 2030 según Pulse of the Fashion Industry 2018 de la Global Fashion Agenda y The Boston Consulting Group destacando los materiales para reducir la huella ambiental, cerrar el ciclo minimizando el consumo de recursos, la industria 4.0 aprovechando las capacidades de automatización y tecnología ubicua, y la reducción de beneficios para la industria de la moda en su conjunto.
La conferenciante profundizó en los impactos que provoca el sistema de la moda desde el transporte, la industria textil y la industria de la indumentaria y de la moda. Recordó el Acuerdo de París, de agosto de 2019, por el que las empresas se comprometen a trabajar en el marco de la iniciativa Science Based Targets, de objetivos medibles científicamente. También distinguió tres tipos de consumidor del 2020: los comprimidos, siempre conectados, perfeccionistas y sin tiempo, los guardianes de la amabilidad,éticos, ecologistas responsables y empáticos, y los creadores de mercado, emprendedores y seguros de sí mismos.
La investigadora defendió que la base de la sostenibilidad es el no al egoísmo, sí a la generosidad y sí a la responsabilidad. Y recalcó que la sostenibilidad tiene que doler y conlleva sacrificio. Terminó afirmando que la moda será sostenible cuando deje de producir tangibles y empiece a producir intangibles.